Reproduzco una intervención de Auden en una mesa
redonda que organizó el PEN Club en Budapest, octubre de 1967. The New York
Review of Books lo rescató en 1986 y lo reproducimos del sitio www.nexos.mx.
Las discusiones sobre el papel del artista en la sociedad
pocas veces dan fruto porque sus participantes no han definido qué quieren
decir con los términos que usan. Mientras malinterpretemos lo que otros dicen,
ni el acuerdo central ni la diferencia genuina de opinión son posibles.
Empezaré, entonces, con algunas definiciones.
Individuo. En primer lugar, un término biológico: un árbol,
un caballo, un hombre, una mujer. En segundo lugar, como el hombre es un animal
social y nace sin formas instintivas de conducta, el término es sociopolítico:
un americano, un doctor, un miembro de la familia Smith. Como individuos somos,
se quiera o no, miembros de una sociedad o de varias sociedades, cuya
naturaleza esta determinada por necesidades biológicas y económicas. Como
individuos nos crean por reproducción sexual y condicionamientos sociales y
sólo se nos puede identificar por las sociedades a las que pertenecemos. Como
individuos, somos comparables, clasificables, contables, reemplazables.